Mendigo en silencio.

La diferencia entre ficción y realidad es que por muy lejana que parezca, la realidad nos deja dentro algo real, sí, impalpable, sí, ahora vacía y lejana, pero en algún momento, alguna vez, verdad...

Si impregno mis labios en café te diré que no puedo escribir si no es por o para ti, si los baño con alcohol no podré hablar, con la elocuencia por los tobillos te besaré y seré tu voz en la afonía sin decir palabra. Si bebo del veneno de tus disparos seré un macabro despiste al tomar tu mano y abrir tus piernas.

Si amaneces con tanto que decir, si te marchas a dormir y le das las buenas noches al techo recién escrito, si tu vientre me extraña, si es tu piel es la que me reclama y al partir ni beso ni flor, si lo pensaras dos veces, si tan sólo escucharas las palabras que digo mientras en silencio me derrito en el movimiento de tu boca mientras hablas, si tanto tengo por qué me siento un mendigo de tu sexo.

Te hago llamar para contarte un cuento mientras duermes, te veo evanescente en cólicos de mantra, no puedo ver tus pasos si la espalda de tus piernas cautiva, incapacita mi expresión e increpa mis decisiones encordadas en la cordura de tu torso desnudo. Si no somos poesía deberías decirme qué hacemos en esta descompostura y derroche de berrinches literarios, si no somos nada por qué es que somos capa y espada, si no somos luchadores dime por qué tan gastado mi escudo y tan afiladas mis garras, si no somos gloria, seremos magia, si no somos historia, seremos nostalgia.


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Texto corto y conciso, uno de esos que extrañaba escribir, sin tiempo de sobra ni tiempo para corregir.

Lean, disfruten y nos leemos lo antes posible, gracias por tanto apoyo siempre.

Tigre.-