Perfume de ansiedad



Lola baja corriendo las escaleras y su vestido de lunares danza en los pasillos , baja dando pequeños saltos de júbilo y vitalidad, quienes anden por aquellos escalones sentirán la dicha por toda la eternidad.

Permite que te cante una canción Lola, una que ya te cansaste de oír pero esta vez te miraré a los ojos y comenzará un Abril, Lola no corras, canta conmigo y no llores más, no deberías mirarme así, no deberías acercarte tanto, no puedo mantener mis ojos abiertos, no puedo mientras tengas tus labios en mi cuello, tu mano en mi pelo, tu sexo en mis cuerdas y gemidos a dos voces.

¡Piedad! Te pido piedad, quita tus piernas de mi alrededor, estás dificultando mi arte, acelerando mi respiración y mi capacidad de razonar, te estás pasando de la línea que separa mis vicios y manías de mi identidad y mis voces, mis dones y mis dioses.
Dulce, dulce y perpetua mirada, cristalina legitimidad y noches de azar y fichas, el cuatro como bandera y una taza negra para despistar.

Tiene una foto escondida bajo su lámpara de noche, me sonríe antes de cerrar sus ojos por última vez cada noche y canta conmigo en silencio bajo las mantas de su cama.

Nadie sabe quién es Lola ni por qué su boca pintada con labial rojo empapa los sueños de los que no saben llevarla, incendia el Sol con tu baile sensual, impregna el viento su perfume virginal, Lola se pasea por la casa en ropa interior cantando una balada en francés y yo, sin haberla visto jamás le escribo a nadie algo que nunca leerá.


Tigre.-

Buen Febrero para todos! Buenas vibras!


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