Bienvenidos al Blog nuevamente, perdón por la tardanza. Comunico que este post será un poco diferente al resto debido a un pequeño detalle… no soy Will. Me presento, soy Florencia, o mejor conocida como DeathFlor. Se preguntarán que pasó que Guille no está presente… bueno, el se ausentará un tiempo. Talvez algunos estén encaminados con respecto a lo que va a pasar con el Blog, ya que el mismo dueño dio algunos detalles mediante el Facebook, pero igualmente paso a explicar como se manejará esto. Actualmente las administradoras del Blog y Grupo del Facebook seremos Camila Yánez y yo, hasta que Guille vuelva a andar por estos pagos nuevamente, supongo que no tardará mucho, así que sean pacientes.
Si bien esto no se asemeja nada comparado con lo que nuestro querido Guille es capaz de escribir, no se desilusionen, ya que no voy a colocar ninguna escritura mía ni nada por el estilo, él se acordó del Blog, de ustedes, y dejó en nuestras manos unos textos escritos con su puño y letra [En realidad con la Pc, pero ustedes me entienden]. Bueno, sin más vueltas les dejo leer lo que vinieron a buscar, Escritos made in: Will.
Disfruten y Bon appétit!

Saludos Atentamente: DeathFlor.+~



El Niño

Entre las mil palabras que duermen en rincones desolados de algún niño sin esperanzas una lágrima da a luz a un nuevo día de rencores y dolor. El joven huye entre las hojas que un otoño eterno roba a los árboles que a cada crepúsculo recuperan como yo la vitalidad. Cae la noche, ruedan las estrellas por el infinito cielo que cubre mis ansias por volver a verte como ayer. Aquel niño muere a gritos y yo desconsolado intento cobijarlo. Vuelan plumas por doquier, tapizando el suelo de una habitación convertida en paraíso, una lágrima que tiernamente roba centímetros de mi piel a medida que va riendo por las cosquillas que provocan las mariposas que revoletean en su interior.

Se hace obvia la nostalgia de un poeta traicionado en el centro de un acto circense, los verdugos que hacen fila para decapitarme cubren sus rostros para que no vea su sonrisa al soltar la guillotina que al contrario de las demás, me mata lentamente, mes a mes, día a día, a cada segundo sin tu compañía.

Sentado entre las primeras filas, entre los fieles e impacientes espectadores, ahí esta el niño que alguna vez supo calmar su ahogado llanto en la reseca piel de un ángel petrificado, humectando con el transitar de sus lágrimas el desértico reino interior de su guardián y, a veces, su más fiel confidente.

Mi hora de morir esta próxima y sin embargo a nadie parece importarle, ¿Qué alimenta sus mórbidas miradas? ¿Qué los tiene tan cautivados? Como puedo giro mi cabeza encerrada entre maderas y alcanzo a divisar en lo alto de un mástil, a alguien emprendiendo su viaje a través de un fina cuerda amarrada a otro poste metros más adelante…

La niña de tez pálida, ojos de hermoso color, sonrisa angelical y porte imponente se dispone a atravesar la cuerda sin redes, sin arneses, sin ninguna protección, eso creí hasta que la vi caer. Con cara de espanto ve acercarse el suelo y no puede evitar llorar, sabe que el final de su viaje es trágico y cada vez está más próximo. El público de tan aterradora situación solo evito aplaudir, ya que cada uno que observaba reía de manera macabra; podría haber dicho todos, pero no, alguien entre todos sufría con la jovencita; el niño ya mayor, ese pequeño que paso su vida sufriendo y todo lo dejo de lado para desplegar dos hermosas y brillantes alas con las que se elevó y detuvo la caída de la muchacha amortiguando de tal manera el golpe que ella parecía dormir tendida en los prados de algún paisaje fantástico. 
 
Sin pretender despertarla, el ahora héroe descendió lentamente, y apoyando sus rodillas en el suelo la recostó sobre su pecho. La mujer levantó su mirada y en un abrazo demostró gratitud, calma y amor, una lágrima tras tanto tiempo volvió a fluir, quienes lo vieron aseguran que salió del otra vez niño, sólo que ahora feliz, yo no lo creo, no conociéndolo.

Es hoy, que aquel héroe de bellas alas todavía recuerda a cada instante el momento en el cual entre su dolor y la desesperación de la niña fue capaz de dejar todo atrás para recuperar el valor y en un vuelo de esos que ya no se ven tan a menudo, salvar a quien hoy, ayer y sólo él sabe hasta cuando, será su amor incondicionalmente.

1 comentario:

  1. me gusta mucho tu blog,
    quiero leer mas!
    el 20 de marzo toca fito
    en el gorki aviso por si quieresn ir!
    saludos...

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